De la carne y otros demonios

Nada como regresar con una recomendación que jamás imaginaria que haría. 

En realidad no lo recomiendo y debo confesar que me siento bastante culpable cuando de comer animales se trata. Más aún cuando es una carne poco común como la de tepezcuintle. 

En honor a la verdad tiene rico sabor como decían, se parece un poco al cerdo pero cambia su color y textura.

Después de años de no escribir mientras fui vegetariana regreso con este post más carnívoro de lo que podría permitirme.

Un plato rico y exótico que talvez no vuelva a probar, preparado por mi madre que además tiene un don para la cocina como ninguna.

Sólo lo probé! (pero quedé con ganas de más) shame on me!!! 

Siempre quise ser parte de esos programas donde te dan a probar de cosas raras y cuando decidí cambiar mis hábitos y no comer más cadáveres, enterré también es posibilidad.

Bueno solo pasé por aquí a confesarme... Después podré contar como la sociedad, el miedo y la falta de información me ganó el pulso con el vegetarianismo al cual me había tercamente apegado por bastante tiempo.

El cáncer de los restaurantes

Recuerdo que abrí este blog con el fin de desahogarme y despotricar por el mal servicio que por karma o mala suerte muchas veces recibo en los restaurantes sin importar la categoría.


Y es que Tiquicia no es el único lugar donde se padece el cáncer de los restaurantes.
Como buena comensal de la comida italiana, no dejo pasar oportunidad para saciar mi antojo. En cualquier parte del mundo donde he ido siempre he encontrado un italiano.


Conozco a alguien que se ha dedicado a probar las hamburguesas de TODOS los lugares a los que va, sin importar que tipo de restaurante sea (no se porque se molesta en leer el menú si al final pide una hamburguesa). Yo que también tengo mis mañas, cuando no se que comer lo resuelvo ordenando una pizza, la comida más popular del mundo.


Uno de esos días, la salida práctica fue pedir una pizza para la cena. El teléfono no tan inteligente de mi amiga, nos dio el número de la Trattoria, a 700 metros del apartamento, en Tempelhof, Berlin. Ordenamos lo que siempre piden los vegetarianos, pizza margarita, pero no tenían servicio de entrega, así que tocó caminar.


Una vez en restaurante decidimos comer ahí, pero la respuesta al mejor estilo alemán fue simple y cortante "zu spät " (muy tarde) ya la pizza estaba empacada. So what? La mujer italiana apenas se las arreglaba para atender dos mesas, el resto del restaurante estaba vacío, pero no podíamos quedarnos ahí.


Talvez sea una buena idea comer el parque ¿compramos algo de tomar? me preguntó mi compañera. Sin embargo recibimos un nuevo NO por parte de la mesera, que perfectamente podría ser la dueña del negocio. "Große Preis", a pesar de que no preguntamos por precio en ningún momento, es más barato si lo compran en un minisuper,  dijo. Tan considerada la señora, preocupada por mi bolsillo.


La moraleja es sencilla: NO  le digan NO al cliente ¿será tan difícil?

Vegetales salteados!!! que buena idea

Sabemos que deberíamos comer vegetales todos los días, aunque no muchos nos alineamos a ese precepto para la buena salud. Sabemos que nos hacen bien, que nos levantan las defensas, que nos dan energía y que nos proveen de vitaminas, en fin,,, sabemos que son vida!!! Sin embargo, algunas personas no somos muy creativas a la hora de elegir ese alimento fundamental en nuestra dieta y nos resultan incípidos y aburridos.

Además de asados, los vegetales son ricos salteados!!! y pocas veces los comemos así. Mis amigos vegetarianos me invitaron a un restaurante de esos donde ellos pueden comer, "vegetarian friendly". Bambai, en Curridabat, es la nueva recomendación, para comer no bueno ni bonito ni barato, sino sano, sabroso y balanceado.

En el mostrador te reciben con una barra de vegetales crudos y diferentes tamaños y precios de tazones, en los cuales podés servirte todo lo que te quepa. Desde garbanzos, hasta hongos frescos, pasando por arroz, pasta, papa, espinaca, etc...Una vez hecha la selección el paso siguiente es escoger el aderezo, aceite de oliva con ajo, genjibre, curri, coco... y a esperar mientras se cocinan tus vegetales a la plancha.

Palillos chinos, sal y pimienta y listo! un tazón de vegetales deliciosos y una pichelito de té blanco de 1500 colones.

También le podés adicionar carne por un valor extra. Para mi la carne salió sobrando y esta vez no desentoné en la mesa.

Qué rico una carnita asada!!! de vegetales....

Siempre he sido gran fanática de los barbiquiu y las cervezas ojalá un domingo en la tarde...

Sin embargo luego de una experiencia renovadora con una dieta cero carne, me ha costado poco a poco volver a la comida normal, y hago énfasis en normal porque comer bien y saludable no es la norma.

Así que orgulllosamente fui la rara que llegó con vegetales para asar al barbiquiu de IT, el departamento con la gente más cool de Betcris (el único que conozco :P).

 

Reaper y yo pasamos por el fresh market donde compramos el chile dulce más caro de la vida (quinientos y pico de colones) pero no importaba, la idea era preparar unos pichos de vegetales que compensaran mi apatía temporal por la carne.

Al ofrecer a la gente pinchos de zuquini con chile y cebolla la reacción de algunos fue muy diplomática con un simple no gracias, o paso, pero la de Hugo fue emblemática: "estoy en una dieta que prohibe estrictamente el consumo de vegetales".

En medio de la carne de res que se asaba lentamente haciendo a todos esperar, más lento aun fue el proceso de cocción de los pinchos de vegetales, que después de todo le hizo la boca agua a más de uno. Elisa, Ruth y Poly se quitaron el antojo y me acompañaron solidariamente.

La lección: ¿sabía usted que en Costa Rica tres de cada diez carros pueden ser tachados en la misma noche, a la misma hora, en la misma calle, a los invitados de la misma fiesta? Al final, asar vegetales no fue lo más raro de la noche.

Dedicado a Nella y con Esta retomo el blog...

Hablando de crepas...

Hace días no sentía hambre suficiente para escribir en este espacio y hoy que decidí volver noté que justo el último post fue sobre crepas. 

Bueno, hablando de crepas, abrieron un lugar en los alrededores de las UCR rico, accesible y moderno. Tengo que confesar que no había ido porque por fuera parecía muy caro, sin embargo esta me la recomendó mi amiga Lazito y fui a probar! Parece más una cafetería que un restaurante, está frente a "Bufalos", les quedo debiendo el nombre.

Me decidí por algo liviano, una crepa de tomate y queso mozzarella con perejil! La pedí para llevar. Estaba un poco fría para mi gusto, imagino que por los ingredientes. Me gustó y ya eso garantiza que regrese pronto.

La próxima vez pido una con pollo!! y les cuento...

Que rico una crepa!

Hace días no escribo porque no he tenido buenas expeiencias en los lugares a donde voy a comer y no quería poner más desaprobaciones que recomendaciones.

Pero es justo de mi parte en este caso reconocer donde si me gusta comer todo el tiempo que lo pienso. Fui por primera vez con Lucy y me gustó, de ahí en adelante he tenido en la mesa compañía de lujo, empezando por mi papá.

Nunca me fallan. A Crekos, lo que yo llamo "la crepería", siempre me apetece ir! un buen capucchino o una soda italiana de manzada verde con una crepa salada en salsa roja...Y si si tengo estómago como para un postre: cheese cake de arándano o fresa. Cualquier cosa que se me ocurra pedir, se que va a estar rico.

Con servicio implecable, es atendido por sus propietarios (una familia con mucha visión y buen gusto) el ambiente es agradable...casual. Para tomarse un buen café Crekos es la opción.

Solo en la Calle de la Amargura

Amargura es en el instante que tengo que salir a buscar almuerzo porque no traje comida de la casa. Es el peor momento del día. ¿Y las opciones?

Muchas personas creen que por estar cerca de la UCR hay variedad y buenos precios pero la verdad es que la oferta es comida del montón y para el montón, a presupuesto de estudiante.

¡Cómo cuesta comer rico y sano en los alrededores de la U! A veces preferiría pasar directo hasta que llegue la hora de la cena y pueda desplazarme a otras vecindades.

Si es comida rápida es muy grasosa y si se trata de comida vegetariana no sabe a nada. Entonces la opción es el típico casado de siempre con todo lo que se supone que no se debe comer en un mismo plato.

El colmo fue hoy en un lugar que se llama World Café. Me sentí tentada por una crepa rellena de pollo y palmito y decidí entrar.

Me acerqué al mostrador para que la chica que atendía me ignorara hablándole a la persona que se encontraba detras mio en la fila: ¿qué desea almorzar? le dijo al señor y yo le contesté (intentando hacerme notar) un plato del día para llevar.

En la caja me dijeron que no tenían recipientes y con tal de ganarse los 1800 colones que costaba el almuerzo me ofreció servirme en un plato y que más tarde lo pasaban a recoger a mi oficina.

Mientras esperaba que saliera mi orden de las cocina, observé que la mesera lavó los vasos usados con la mano y sin jabón . Para darles el beneficio de la duda y porque ya había pagado esperé a ver que tan rica iba a estar la comida. La crepa era más petit-pois con vainicas, el palmito no lo sentí y del pollo solo los huesos.

Llené el sin sabor del almuerzo con unos helados caceros de cas que preparó una compañera y que nos endulzó la tarde a todos en la oficina. Lástima por la gente del World Café! un lugar más en la lista de lugares a donde no ir.

Y sin referirme a la indigestión que me produjo oir en las noticias de boca de la ministra de transportes insinuar que fue culpa del chofer que 7 personas hayan muerto y otras 50 más resultaran heridas tras caer un bus al precipio por un puente que ellos no repararon.